Si les decimos a los chavales que llenen un papel, cartulina o lienzo con acuarelas de colores se van a poner como motos. Les encanta rellenar los espacios.
Después les damos unos limones cortados por la mitad y les decimos que aprieten encima de las acuarelas.
En el sitio en donde caen las gotas veremos como el color se va disolviendo quedando un efecto fantástico.
La acidez del limón ataca el color y lo decolora.
Realmente es un efecto como mágico. Les va a entusiasmar.
¡Pues tengo que hacer la prueba yo! Ya te diré el resultado, je, je. Besos.
ResponderEliminartengo acuarelas, tengo limones, tengo las laminas y tengo una sobrina, mañana lo intentamos!
ResponderEliminarFeliz fin de semana
Desde luego que espero tu experiencia, seño. bss
ResponderEliminarPues creo que lo que faltaba, que era ilusión y ganas, tampoco te faltan, así que a trabajar!!! bss, pita.
ResponderEliminar¡Me encantaaaaa!
ResponderEliminarGracias, Yolanda.
ResponderEliminarLo voy a probar yo primero para ver el efecto ..para después lo hagan con mis alumnos... gracais.
ResponderEliminarYa verás como te gusta. Gracias por tu comentario
ResponderEliminarCon témperas se puede hacer?
ResponderEliminarNo lo he probado nunca, pero haz la prueba a ver que tal te sale.
ResponderEliminar¿Se puede hacer con témperas?
ResponderEliminarHola. No lo he probado con témperas, pero es una posibilidad. Inténtalo y me dices.
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