31 mar 2024

4 láminas de expresión oral con las estaciones del año

Estas cuatro láminas nos enseñan un paisaje visto en las cuatro estaciones del año.

Lo más positivo es que los niños-as se pueden dar cuenta de las variaciones en el paisaje, y buscar los detalles diferenciales que suelen escapar a la vista y que, dado que están en una misma lámina, se aprecian como un conjunto.

Trabajar la expresión oral con ellas acelera el proceso de aprendizaje de los peques, ya que la expresión refuerza el lenguaje, convirtiéndose así en una herramienta imprescindible para su desarrollo integral y afectivamente positivo.

Cuando se avanza en la expresión oral se mejora la comunicación entre iguales, el vocabulario, la relación en los distintos escenarios sociales y la propia identidad.

No cabe duda que también se pueden utilizar estas láminas para el mural de la asamblea en la zona de indicación del tiempo, tanto de fecha como atmosférico.

29 mar 2024

TÉCNICAS PLÁSTICAS: pintamos en aluminio

Todos tenemos papel de aluminio en el cole o en casa, y algunos rotuladores de colorines, pues esta técnica se basa en eso, en pintar papel de aluminio con rotulador.

Luego echaremos agua por encima, no mucha, con un pulverizador, y después pondremos el papel encima que se mojará cogiendo los colores del rotulador al despegarlo del aluminio.

Con esta técnica podemos hacer cuadros abstractos, sin dibujos concretos, o bien colorear dibujos impresos en un papel, como es el caso de la foto inferior que nos sirve como ejemplo.

Cuando separamos nuestro papel del aluminio debemos dejarla secar, claro.

Si los colores son fosforitos o brillantes quedan verdaderas preciosidades para hacer tarjetas, carteles, marcapáginas, regalitos...


27 mar 2024

EXPERIMENTO: observamos los colores de la calma

¿Cómo vamos a hacer eso, si la calma es una forma de sentirnos? 

Muchas os haréis esta pregunta. Nada más fácil que hacer este experimento para resolverlo.

Consiste en mezclar dos líquidos de diferente densidad con diferentes colores. Lo haremos mezclando estos colores y líquidos.

Vamos a ello.

Materiales:
2 frascos de cristal o plástico transparente
Aceite para bebé
Agua
Jarra medidora de líquidos
Colorantes alimenticios con base de aceite
Colorantes alimenticios con base de agua
Un palillo

Procedimiento:
Llenar un frasco hasta un poco menos de la mitad de agua.
Echar el agua en el medidor y anotar el resultado.
Volver a echar el agua en el frasco. Verter unas cuantas gotas de colorante a base de agua.
Cerrar el frasco y agitar bien.
Verter aceite de bebé en el medidor hasta llegar a la misma cantidad que tenemos anotada.
Con el palillo coger un poco de colorante a base de aceite.
Mezclar con el aceite del medidor removiendo bien.
Verter el aceite coloreado encima del agua coloreada del frasco.
Cerrar el frasco y agitar bien.
Dejar encima de una mesa y comprobar, observando directamente, cómo los colores que se han mezclado al agitar poco a poco vuelven a separarse en los dos originales.

NOTA: para tener un resultado más llamativo es importante escoger bien los colores, por ejemplo podemos elegir amarillo-azul que al agitar nos dará verde, o rojo-amarillo que nos dará naranja.

Podemos hacer tantos frascos como colores queramos conseguir.

Mientras los chavales están mirando cómo se separan los colores observaremos en clase UNA CALMA maravillosa, porque ellos también están sintiendo eso, CALMA.

Si lo queréis ver en vídeo pinchad en la imagen.

TODOS LOS EXPERIMENTOS LOS DEBEN HACER CON UN ADULTO Y MANTENIENDO LAS CORRESPONDIENTES MEDIDAS DE SEGURIDAD.

25 mar 2024

El rincón de la CALMA

Es el rincón al que los niños-as pueden acudir cuando se sienten sobrepasados por sus emociones.

Se puede utilizar siempre que lo necesiten y permanecen en él hasta que se sientan mejor.

Esta herramienta es necesaria para que los peques aprendan a controlar sus emociones por sí mismos, aunque nunca les va a faltar la ayuda de los adultos, desde luego.

¿CÓMO HACER UN RINCÓN DE LA CALMA EN EL AULA?

La primera premisa es que sea un lugar común hecho por todos, por lo que nos interesa muchísimo que sean los propios niños los que intervengan en su construcción.

Estos son los pasos, más o menos, que podemos seguir para realizarlo:
-Elegimos un rincón agradable de la clase.
-Debe ser cómodo, por lo que pondremos colchonetas, alfombras, mantitas y cojines, pero en el suelo.
-Como será una zona de refugio se pueden poner elementos como una tienda de campaña, unas telas que hagan de refugio o algo así.
-Podemos poner muchos tipos de elementos: un frasco de la calma, cuentos emocionales, hojas y pinturas, mandalas para pintar, peluches e incluso carteles de la calma como el arco iris.
-Los colores de los materiales no deben ser chillones, pues estos colores excitan más que calman, por lo que preferiremos colores suaves como el blanco, beige o cualquiera como el granate, que aunque es más apagado da sensación de confort.
-Poner un nombre elegido entre todos, como la cueva, la cabaña, el refugio, etc.

Al principio se debe acompañar a los peques, sentarnos cerca de ellos y enseñarles algunas técnicas de relajación como contar hasta 10, técnicas de respiración, leer o ver un cuento o coger un peluche y contarle cómo se siente o lo que le ha pasado.

El rincón de la calma no es un rincón de pensar para cuando los niños están muy enfadados, ni tampoco lo usaremos como un lugar de castigo, ya que su efecto sería el contrario de su objetivo, y ellos lo asociarán con un lugar negativo al que no quieren ir. 

Hay que recordar que el objetivo del rincón de la calma es tener un espacio donde controlar y calmar nuestras emociones, sobre todo las más negativas.

23 mar 2024

Ayudamos al planeta en LA HORA DEL PLANETA


APAGA LA LUZ DURANTE 60 MINUTOS

La Hora del Planeta es un movimiento mundial en el que participan más de 190 países y millones de personas apagando las luces de sus hogares, empresas, edificios y monumentos más emblemáticos. 

El movimiento nació hace 17 años en Sidney, Australia, y desde entonces se ha convertido en el mayor símbolo de lucha contra el cambio climático y la pérdida de biodiversidad.

Apagar la luz y la energía de una casa durante 60 minutos no va a salvar al planeta del cambio climático, pero esta acción ayuda a crear conciencia de cómo podemos prevenir este cambio con pequeños gestos que pueden ayudarnos a ahorrar energía y a optimizar los recursos y, como consecuencia, también a disminuir la contaminación atmosférica. Y es en este sentido, en el de la concienciación, en el que la Hora del Planeta adquiere relevancia como herramienta educativa.

Hablemos con los niños y niñas sobre ello en la escuela.

 Pincha en la imagen.