Los juegos de palabras favorecen el desarrollo de la creatividad, a la vez que mejoran el lenguaje.
Son un recurso excelente para estimular la agudeza mental y el pensamiento estratégico desde una edad temprana, así como una buena estrategia para entrenar la memoria.
Una de sus grandes ventajas es que no necesitan tablero o elementos adicionales y por eso se puede jugar en cualquier sitio y momento, en casa, en los viajes, en la piscina, en el campo...
En Etapa Infantil se pueden hacer algunos de los juegos de palabras más populares y divertidos que hay. Son juegos sencillos que recurren básicamente a la creatividad.
Entre ellos podemos encontrar:
LAS PALABRAS ENCADENADAS
Un juego clásico y sencillo. Se puede jugar con la cantidad de jugadores que se quiera y se pueden ir añadiendo en cualquier momento más participantes. El juego consiste en decir una palabra y quedarse con la última sílaba, el siguiente jugador deberá empezar su palabra con esa última sílaba de la anterior palabra y así sucesivamente. Cuando una palabra acaba en una sílaba que es difícil y no se puede hacer otra palabra se para el juego y se comienza otra vez.
Es increíble la cantidad de palabras que salen y la imaginación que desarrolla.
LOS NOMBRES DE PELÍCULAS
Este juego consiste en adivinar el nombre de una película a través de la mímica. En el juego clásico se necesitan al menos 4 jugadores, que forman dos equipos. Sin embargo, también se puede jugar entre dos o tres personas de manera individual. En el juego, uno de los participantes piensa en el nombre de una película y debe representar mediante la mímica, es decir, sin usar palabras ni sonidos, el nombre del filme. El resto debe descifrar de qué película se trata.
Para indicar el número de palabras se suelen utilizar los dedos de la mano y, cuando se represente una palabra en concreto se debe señalar a cuál se refiere, de manera que los jugadores puedan tener una idea más clara del nombre completo. Gana el jugador que adivine primero el nombre de la película completa o, en su defecto, quien más palabras haya adivinado. Lo ideal es apostar por nombres de películas que conozcáis todos, pero una vez que vayáis ganando habilidades, seréis capaces de descubrir incluso los filmes que no habéis visto.
VEO, VEO
Este es el clásico de los clásicos. Un jugador comienza por escoger un objeto (por ejemplo, una silla) y dice: -Veo veo. Los demás jugadores dirán: -¿Qué ves? El primer jugador de nuevo dirá: -Una cosita que empieza por la letra... Los demás participantes irán diciendo cosas que estén en la sala que empiecen por esa letra hasta adivinarla. También se puede jugar sin que se vea la cosa elegida.
El juego termina cuando después de un rato nadie ha adivinado la palabra.
LA HISTORIA INFINITA
Con este juego vamos a crear una historia que cobre forma a medida que el juego avanza. Para empezar, uno de los participantes debe decir una palabra. El jugador que está a su lado debe repetir esa palabra y añadir otra que le confiera sentido a la anterior. Así sucesivamente hasta crear una historia entre todos. Gana quien más palabras consiga recordar.
Lo divertido llega cuando, al ir sumando palabras, a los jugadores les resulta difícil recordar los términos anteriores y cometen equivocaciones graciosas. Sin duda, un excelente entrenamiento para la memoria y la creatividad que dará lugar a historias graciosas, a veces absurdas, que asegurarán la diversión. Una de sus mayores ventajas es que pueden sumarse tantos jugadores como quieran, por lo que es un juego perfecto para divertirse tanto en clase como en familia.
EL AHORCADO
La idea de este juego es adivinar la palabra que ha pensado uno de los participantes a partir de las letras que la forman. Uno de los jugadores debe pensar en una palabra, que puede ser más o menos sencilla, y escribir en un papel tantos guiones como letras tenga la palabra. Mientras, los demás participantes deben adivinar la palabra diciendo una letra en cada turno.
Si aciertan la letra, el jugador que ha pensado la palabra debe escribirla en el lugar que corresponde, incluso si esta se repite. Por cada error, debe dibujar un elemento de la figura de un ahorcado. Gana el juego quien primero complete la palabra antes de que el jugador termine el dibujo del ahorcado, en cuyo caso ganará quien ha pensado la palabra.
DE LA A A LA Z
Es un juego de palabras muy sencillo. El objetivo del juego consiste en decir una palabra que comience con cada letra del abecedario. Empezando por la A y hasta la Z, cada jugador debe decir una palabra que inicie con la letra que toque. En este caso, gana quien más palabras consiga decir. Sin duda, un excelente ejercicio para entrenar la memoria y la agilidad mental mientras pasáis un rato divertido.
Una alternativa para complicar el juego es hacerlo por categorías, como animales, cosas de la cocina, de la casa, del monte, nombres de personas, juguetes o juegos, familiares, nombres de dibujos animados, películas infantiles, países, ciudades de España o comidas. Lo ideal sería empezar por categorías más generales y, a medida que vayáis desarrollando habilidades, ir a categorías más específicas.
LA RIMA
Se trata de decir palabras con la misma terminación, como ajo y bajo. Para ello, empieza un participante diciendo cualquier palabra que le venga a la mente. El resto de jugadores deberán pensar un término que rime con la palabra anterior. Al final, gana quien más palabras consiga decir con esa terminación.
Es un juego muy entretenido que además de desarrollar el vocabulario de los más peques, entrena la memoria y la creatividad. Además, como pueden sumarse tantos jugadores como quieran, es un juego ideal para jugar en clase o en familia. Y, como no necesita recursos específicos, es perfecto para jugar en cualquier momento y pasar un rato divertido.