Esta es una técnica sencilla y vistosa.
Consiste en pintar el papel de forma simétrica con una cuerdecita.
En un cuenco ponemos pintura de color o tinta de color e impregnamos una cuerdecita de algodón o cordón fino en la pintura, de unos 20 ó 25 cm. (la longitud dependerá del tamaño del papel que usemos).
Doblamos una hoja de papel por la mitad y ponemos la cuerda haciendo diferentes formas en una mitad, dejando un poco de cuerda sobresalir por debajo del papel. Cerramos la otra mitad encima de la cuerda y ponemos un libro pesado encima de todo para que la fuerza sea mayor y el papel no se mueva. Tiramos fuertemente de la cuerda que ha quedado por fuera y... al abrirlo veremos lo bonito que ha quedado.
No llenéis la cuerda con demasiada pintura porque queda todo como sucio, es mejor que quitéis el exceso de pintura con la mano.
Se puede hacer impregnando varios colores como en la foto. El resultado siempre es asombroso.
Os dejo un vídeo para que sea más fácil.
Pincha en la imagen.