En plena primavera las flores son nuestra distracción visual preferida, pero están vivas.
Muchos niños y niñas no entienden que forman parte de un ser vivo, la planta, y en cuanto ven una flor, sea grande o pequeña, la arrancan sin pensar que aparte de su belleza cumplen una función primordial para la planta, su reproducción.
Por ello, he pensado en que este experimento, si no novedoso, si atractivo, les va a venir fenomenal para que entiendan que como seres vivos que son deben beber agua.
Vamos a tintar flores aprendiendo que las plantas son parte de nuestro ecosistema, de nuestra vida en el planeta, de su inestimable ayuda y que, como seres vivos que son, deben recibir el respeto que merecen.
Materiales:
4 claveles blancos frescos
Agua
Colorante alimenticio
4 tarros de cristal o vasos
Procedimiento:
Echar agua en cada vaso hasta la mitad.
Añadir a cada vaso unas gotas de colorante de distinto color.
Remover con un palito.
Cortar los tallos de las flores para que sobresalgan un poco de los vasos.
Distribuir una flor en cada vaso.
Esperar, varios días es lo normal, hasta que la flor se coloree por la absorción de agua.
NOTA: es mejor que el agua esté muy coloreada porque así se verá mucho mejor el cambio de color de la flor. Procurar que las flores sean casi recién cortadas porque así absorberán más fácilmente el agua.
TODOS LOS EXPERIMENTOS LOS DEBEN HACER CON UN ADULTO Y MANTENIENDO LAS CORRESPONDIENTES MEDIDAS DE SEGURIDAD.