Un proceso que combate el aburrimiento y que produce excelentes resultados artísticos.
Nos basamos en la diferencia de densidad entre el agua y el aceite, ya explicado en la sección experimentos de este blog.
En una bandeja mayor que el papel que usaremos ponemos agua, coloreada con colorante alimenticio al gusto, a una altura de unos tres dedos. Con una pipeta o cuentagotas iremos echando por encima unas gotas de aceite de cocina. Pondremos el papel, con el nombre del peque puesto por detrás, sobre ellos y retiramos cogiendo bien por las puntas.
Es necesario dejar secar el papel en un lugar como una rejilla o un papel continuo o absorbente para que no se pringue todo.
Yo aconsejo hacerlo con batas o camisetas viejas puestas encima porque, a veces, no resulta tan limpio como pensamos.
También aconsejo tener cerca un detergente lavavajillas y un trapo para dejar todo bien limpio, ya que los peques empiezan a hacerlo con menos paciencia y tranquilidad de la que se necesita.
4 comentarios :
que bonito queda! a ver si consigo sacar tiempo estas semanas
Bsos
Sencillo y divertido, besitos
Y puedes hacer unos papeles para forrar preciosos, pita. Un bisou.
Ahora a practicar con las nietas, Blanca
Publicar un comentario