Cuando vienen los peques al cole solemos pasar lista para saber los que han faltado y por eso tenemos un edificio que representa al colegio y otro que representa a la casa.
En estos carteles que dejo, después de plastificados, se pueden pegar trocitos de velcro para poner o bien las fotos de los más pequeños, o bien los nombres, primero en mayúsculas, luego en minúsculas y al final escritos por ellos mismos.
Cuando un niño o niña está enfermo o ha tenido que faltar por lo que sea, su foto o nombre pasa a la casita (que es donde suele estar). Al día siguiente vuelven todos al colegio y cuando se pasa lista se vuelve a repetir la misma operación con los que faltan.
Esta labor la suele hacer el encargado/a de clase.
Al final se cuentan los que han faltado, niños, niñas y total. Así van viendo que los números tienen siempre una finalidad.