24 ene 2023

Muchos juegos de cartas

Los juegos de cartas son una estupenda opción para aprender a respetar turnos, practicar materias como las matemáticas o la geografía, la búsqueda de estrategias para resolver problemas, seguir normas, reforzar la memoria, abordar la competitividad e incluso el saber perder; desde una perspectiva positiva, y un sin fin de habilidades que completarán el desarrollo integral de nuestros peques.

Juegos de cartas hay de todos los tipos y colores, pero los más clásicos para la edad de nuestros chavales son éstos:

EL BURRO

Para empezar en este juego de cartas para niños, debes elegir tantos números como personas vayáis a jugar. Por ejemplo, si sois 4 personas, podéis coger todos los 1, 2, 3 y 4 de la baraja.  Por tanto siempre tendréis el número de cartas igual al número de cartas por 4, que son los 4 palos.  Se reparten todas las cartas elegidas a cada jugador.

Una vez que tengáis las cartas todas repartidas tenéis que contar en voz alta hasta 3 y pasar  al compañero de la derecha una carta que no os sirve para cumplir el objetivo. Y así sucesivamente hasta que tengáis las 4 cartas iguales, entonces hay que poner la palma en medio de la mesa y gritar BURRO con todas las fuerzas, seguidamente todos tienen que hacer lo mismo, el último que ponga la mano perderá y de castigo se llevará la letra B, de Burro, cuando antes tengas todas las letras, antes pierdes.

MEMORY

Este juego tradicional ayuda mucho en incrementar la memoria de los más pequeños. Cuanto más juegues más desarrollan su memoria. Además, este juego se puede jugar a cualquier edad. Cuanto más pequeño sea la edad del niño-a, menos cartas debes poner. Por ejemplo, para peques a partir de 3 años, puedes empezar con 6 cartas y así se van subiendo el número de cartas hasta que la complejidad sea alta.

El objetivo de este juego es hacer parejas. Coloca las cartas boca-abajo y cada jugador levanta dos, si son pareja se las queda, si no las vuelve a dejar en el mismo sitio. Por lo que el niño deberá desarrollar la memoria para saber dónde están las parejas. Gana el que mayor número de cartas tenga al final de la partida.

EL UNO

Normalmente este juego se juega con la baraja especial para el Uno. Por lo que ya no sirve la baraja española o francesa. Se juega desde dos jugadores aunque es más divertido a partir de tres. Aquí está el enlace para saber cómo se juega.

LA BRISCA

Un juego de cartas para niños súper tradicional y sólo hace falta una baraja. Es ideal para que jueguen los abuelos con los niños y desde 2 personas ya se puede jugar. En este juego la carta que más vale  es el As, luego el tres (o brisca) y luego el resto desde arriba, es decir, el 12 es el más alto y así hacia abajo.

Se reparten tres cartas a cada jugador y el resto se queda en un montón boca abajo, levantando una carta.  La carta que se levanta mostrara el palo que más vale o también llamado triunfo. El que empieza tira una carta y su palo es el que todos los demás deben seguir, es decir, si se tiene de ese palo hay que tirarlo y si se puede ganarlo. Si no se tiene del palo, se deberá tirar triunfo, por lo que el que un triunfo aunque sea pequeño ganaría siempre a cualquier otro palo.  El que gana esa partida se lleva las cartas y es el primero para la siguiente ronda. Cuando se terminan las cartas, se vuelve a repartir otras tres hasta terminar la baraja.

El jugador que más cartas tenga al final es el que gana la partida.

EL CINQUILLO

Es muy fácil de jugar. Si juegas con niños pequeños, utiliza una baraja, cuando los niños son más mayores puedes hacerlo más complejo y utilizar dos barajas. Se reparten todas las cartas de una baraja y el objetivo es poner todas las cartas una detrás de otra por números y por palos, de forma que al final quedará una escalera del  1 al 12. Cada turno el  jugador tira una carta siempre y cuando forme una escalera del palo entero. Sólo se puede empezar el palo por el número cinco. Si llegado un momento no puedes tirar, deberás decir paso y continuará el siguiente.

LA ESCOBA

Este juego es para niños que ya saben sumar. Es muy bueno para incrementar la capacidad numérica. Se juega con la baraja española sin el 8 y el 9. Cada carta tiene el valor que le corresponde excepto la Jota que vale 8, el caballo vale 9 y el rey vale 10. El objetivo es conseguir con una carta qué carta propia más todas las que puedas de la mesa sumar la cantidad de  15.

El juego la Escoba, se empieza la partida con 4 cartas boca abajo y cada jugador y se reparten tres cartas a cada jugador.  Una vez empieza la partida se ponen las cartas de en medio boca arriba y cada jugador en su turno, deberá ver si con una carta que tiene más alguna o algunas, del montón de en medio, puede sumar 15. Si es así se lleva todas las cartas que sumen 15, y le toca al siguiente jugador que hará lo mismo. Si no puede sumar, deberá dejar una de sus cartas en el montón.

Si el jugador forma 15 con todas las cartas de en medio, se sumará una escoba. Es decir, si consigue limpiar el tapete contará una escoba.

Gana quien tenga más escobas. Se da una Escoba por cada una de estas acciones:

Al que tenga mayor número de oros
Al que tenga mayor número de cartas
Al que tenga mayor número de 7
Al que tenga el 7 de oros, ya en si es una escoba

AL DESPUYAT

En este juego de cartas para niños y adultos es muy sencillito, por lo que los pequeños se lo pasarán en grande.  Se reparten todas las cartas de la baraja por igual a cada jugador. Cada uno la pone en un montón boca abajo sin verlas. Cada uno saca una carta en el tapete el que saque la carta con el número más grande es el que gana y se lleva las cartas  de los otros jugadores. El objetivo es tener mayor número de cartas al terminar la partida. En este juego el 1 es el que más vale.


Además de estos juegos tenemos un montón de juegos de cartas clásicos como son los de las familias, a mis chavales les han gustado siempre, pero hay una infinidad.

Os dejo unos enlaces para  que podáis elegir barajas. 


23 ene 2023

9 juegos cooperativos

Los juegos cooperativos son juegos en organizados en grupos o equipos en los que la participación es su aspecto más relevante.

Las actividades colaborativas fomentan la ayuda, la empatía, la organización, la coordinación, la resolución de conflictos, la toma de decisiones y evitan las frustraciones de la derrota, haciendo que los peques no se sienten presionados por ganar.

Trabajando en equipo tienen la posibilidad de aportar sus opiniones e ideas y oír las de los demás.

Son importantes porque fomentan: la relación y comunicación con los demás, comparten objetivos y metas, crean confianza, les ayuda a organizar los trabajos y aprenden habilidades sociales importantes para su desarrollo.

ALGUNOS JUEGOS COOPERATIVOS

1. La cadena o el rescate
El juego comienza con dos niños cogidos de la mano, que son los dos primeros eslabones de la cadena. Tendrán que ir tocando al resto de niños para unirlos a la cadena. Los niños intentarán huir. Si un niño es tocado deberá cogerle la mano a los que están en la cadena y así irán alargándola.

Cuando pillan al último jugador se termina la ronda y la nueva partida comenzará con los dos primeros jugadores que fueron tocados en la primera.

2. El globo
Los jugadores lanzarán un globo inflado al aire. El globo no puede tocar el suelo, así que hay que ir dándole toques entre todos, evitando así que se caiga.

3. El paracaídas
Con el paracaídas se puede jugar a muchos juegos. Uno de ellos es, por ejemplo, el juego de la canasta en el que los niños deben agarrar el paracaídas con dos manos alrededor de su contorno.

Se coloca una pelota encima del paracaídas. Hay que tener en cuenta que la pelota quepa por el agujero central de la tela. La misión de los niños será hacer canasta entre todos en el agujero moviendo el paracaídas.

4. El escondite inglés
A este seguro que jugabas en tu infancia. ¿A que recuerdas la frase: 'Una, dos y tres, al escondite inglés, sin mover las manos ni los pies'?

El que 'se la liga' tiene que ponerse mirando a la pared. El resto estarán a unos metros de él en fila. El niño que está contra la pared dirá la frase y se volverá. Mientras pronuncia la frase, los niños tendrán que ir avanzando hacia la pared, pero ¡con cuidado! porque cuando se vuelva el niño de la pared, los demás tendrán que quedarse quietos como estatuas. A quien vea moverse, tendrá que retroceder hasta el punto de partida. ¡Gana el primero que llegue a tocar la pared!

5. Llevando el balón
Los niños se organizan por parejas. Se selecciona un recorrido con una salida y una meta. Tendrán que llevar un balón entre cada pareja, pero sin tocarlo con las manos. Por ejemplo, espalda con espalda, o lo que se les ocurra. Si el balón se les cae, tendrán que volver a la línea de salida. La pareja que llegue antes a la meta será quien gane el juego.

6. Bote, bote
Hay que hacer un círculo en el suelo con la tiza. Los niños deben coger un bote de refresco vacío o una botella de plástico o de zumo vacía y ponerlo justo en medio del círculo. Harán un sorteo a ver quién se la liga.

Al que le toque, se tiene que poner de espaldas al bote. Otro niño distinto tiene que dar una patada al bote. El que se la liga tiene que ir a por el bote, cogerlo y ponerlo de nuevo en el círculo y gritar ¡BOTE! en ese momento. Entre que va a coger el bote y lo vuelve a colocar en su sitio, los demás tienen que correr a esconderse.

A partir de ahí el que se la liga tendrá que ir a buscar al resto del grupo. Si ve a alguno de ellos, volverá corriendo al círculo y meterá el pie dentro y gritará: ¡BOTE, BOTE por Carlos! o cualquiera que sea el nombre del jugador. En este caso Carlos tendrá que salir de su escondite y meterse en el círculo de tiza.

El 'cazado' aún no lo tiene todo perdido, porque cualquiera de sus compañeros escondidos puede venir a salvarle, dándole una patada al bote. Si alguien lo consigue, el jugador o jugadores atrapados serán inmediatamente liberados y podrán esconderse otra vez. El que se la liga tendrá que descubrir a todos para que se acabe el juego.

7. Pies quietos
Tienen que jugar al menos tres niños, pero es mejor a partir de cinco. Uno de ellos se la ligará y se tiene que colocar en el centro y tirar la pelota gritando el nombre de uno de los jugadores. Entonces, el jugador nombrado tiene que coger la pelota corriendo y los demás tienen que salir corriendo.

Cuando el jugador tiene la pelota en su poder tiene que gritar: ¡Pies quietos!: En ese momento el resto de los jugadores se tienen que quedar totalmente parados donde estén.

El jugador que tiene la pelota da tres saltos hacia uno de los jugadores; al que le quede más cerca y le tira la pelota. Si le da, el jugador tocado se tiene que apuntar una falta y si no le da, el que se tiene que apuntar la falta es él mismo por no darle. A la tercera falta el jugador que sea se elimina. El juego acaba cuando se ha eliminado a todo el mundo y solo queda un jugador.

8. Carrera de sacos
Los jugadores tienen que meter las dos piernas en los sacos y sujetarlos con las manos. Empieza la carrera como cualquier carrera normal. Los participantes deben llegar a la meta dando saltos en los sacos. No está permitido agarrar ni empujar a los demás participantes. ¡Gana el juego quien llega antes a la meta!

Hay una variante muy divertida de las carreras de sacos que es por parejas. Los jugadores hacen parejas y se les ata unidos los tobillos para que tengan dificultades para correr. Los jugadores deben llegar a la meta dando saltos o como puedan avanzar andando, intentando mantenerse coordinados.

9. El lago encantado
Para jugar a este juego se necesita tiza y aros de plástico. Se delimita un espacio en el suelo en forma de elipse a modo de lago.

Se colocan todos los aros dentro del espacio que se ha convertido en un lago encantado en el que nadie puede tocar el agua (el espacio que hay fuera de los aros). Se colocan los aros atravesando el lago. Ningún niño puede tocar el agua, ya que si alguien cae a él se le congela el corazón. Solo se puede pisar en el interior de los aros, que imitan piedras por las que se cruza el lago.

Si alguien cae al lago, no puede moverse hasta que venga otro jugador y lo salve, deshelando el corazón del compañero dándole un abrazo.

21 ene 2023

15 juegos de mesa para niños y niñas de 3 a 6 años

Los juegos de mesa son los juegos que constan de un tablero y fichas de diferentes formas y colores, lo que obliga a que se organice sobre una superficie plana, generalmente una mesa, de ahí su nombre. 

Según las reglas, que son diferentes para cada juego, pueden participar en ellos una o más personas.

Los juegos de mesa aportan muchas habilidades y desarrollan la paciencia, la turnicidad, el acatamiento de las reglas, la estrategia, la creatividad... además de fortalecer las relaciones con los demás participantes.

Son los juegos preferidos para desarrollar en familia. Y en los días de frío, lluvia y mal tiempo son los favoritos de los peques.

Os dejo 15 de los juegos de mesa que a los chavales les encantan.

Pincha en la imagen.

20 ene 2023

TÉCNICAS PLÁSTICAS: fondos con plástico, rotulador y agua

No necesitamos mucho para hacer estos fondos tan bonitos que nos pueden servir para pegar encima cualquier silueta o para pintarla si nos gusta más.

En las fotografías inferiores se explica visualmente el proceso, pero lo iré detallando un poco.

Necesitamos rotuladores de colores, un plástico, un vaso con agua y un papel grueso o cartulina.

Empezamos delimitando el espacio que vamos a pintar en el plástico. Esto es importante para que los niños-as no se salgan. Podemos poner cinta de carrocero.

Pintamos con los rotuladores por encima del plástico como se ve en la foto.
Con un pincel o con los dedos echamos un poco de agua por encima de lo pintado.

No se debe enguachinar demasiado.
Damos la vuelta al plástico y lo ponemos encima del papel en el que vamos a hacer el fondo.

Con los dedos vamos extendiendo el rotulador.
Cuando hayamos terminado de extender el rotulador, como está en la imagen, levantamos el plástico desde una esquina poco a poco.

Este fondo lo dejamos secar y ya podemos pegar o pintar encima lo que queramos.

En el ejemplo se ha recortado un lobo y se ha pegado encima.

Os van a salir unas obras de arte preciosas, seguro.

18 ene 2023

EXPERIMENTO: el embudo mágico

Los embudos están diseñados para meter de forma más fácil los líquidos en recipientes de bocas estrechas.

En este experimento vamos a comprobar que nuestro embudo se va a rebelar y no va a querer hacer su trabajo, sino todo lo contrario. 

¿Es un embudo mágico? Sí, porque va a demostrarnos cómo actúan la presión del aire y la del agua, ya que las vamos a enfrentar. 


Materiales:
Una botella
Agua
Embudo
Plastilina

Procedimiento:
Colocar el embudo en la parte superior de la botella.
Sellar con plastilina el espacio que queda entre el embudo y la botella.
Verter el agua en el embudo.

NOTA: es conveniente hacer el experimento dentro de un barreño para no derramar el agua por todas partes.

TODOS LOS EXPERIMENTOS LOS DEBEN HACER CON UN ADULTO Y MANTENIENDO LAS CORRESPONDIENTES MEDIDAS DE SEGURIDAD.