Seguimos con nuestros experimentos de los miércoles.
Esta vez hemos aprovechado los poquísimos días de sol que ha hecho y hemos construido un reloj solar.
Como veis consta de un cartón blanco con un círculo pintado y un lápiz, también puede ser un palito de comida china o de brocheta (aunque este es más fino y se ve peor), hincado en el centro del círculo.
Luego hemos puesto nuestro reloj al sol que entraba por la ventana de clase, desde las nueve de la mañana hasta las doce, y hemos ido observando hora a hora dónde estaba la sombra para marcar una raya horaria, (bueno ellos-as lo miraban segundo a segundo). Las demás horas... a voleo porque el sol estaba en otra clase, jajaj.
Ha sido un gran experimento que nos ha ayudado a comprobar que nos movemos (el sol se mueve dicen ellos-as), y que es fácil predecir la mañana y la tarde, la hora de ir al patio y la de ir a comer con solo observar su posición.
Pincha en la imagen.