A muchos niños las pelotitas antiestrés les calman mucho cuando están alterados por algo. A los mayores nos pasa igual.
En el cole o en casa hay que procurar tener unas pocas en un sitio fijo para que cuando tengan la necesidad puedan cogerlas y relajarse.
Sirven también para los momentos de rabia, de ofuscación, de rabietas o en los enfados.
Voy a presentar dos estilos diferentes para hacerlas:
1. Pelotitas de harina de maíz.
Solo necesitamos unos globos llamativos, un kilo de harina de maíz, un embudo y una cuchara. Iremos llenando los globos de harina con la ayuda del embudo, hacemos un nudito al final y listo.
También se pueden hacer de azúcar, sal, harina de trigo, semillas de mijo o quinoa...
Echamos en un bol un par de sobres de bolitas de gel y añadimos agua. Esperamos a que absorban el agua y se hinchen (unas 4 horas). Echamos las bolitas en una botella vacía de agua y ponemos el globo en la boca de la botella. Invirtiendo la botella las bolitas van entrando en el globo con facilidad hasta llenarlo. Hacemos el nudo final y listo.
6 comentarios :
Muy bonitas, besos.
Pues si. esas pelotitas no nos vienen mal de vez en cuando. Besitos.
¡Tienes razón, Blanca, son muy útiles! Gracias por compartir estos modelos.
Un besote.
GRacias, Blanca. bss
ahora que estás más relajada... no te van a hacer falta, jajajaj. besitos seño.
pues no creas, Anabel, yo ya he estropeado más de una, jajajaj.
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